Investigadores de la Universidad de California en Invine (UCI) y de la Universidad de Australia Occidental (UWA) han descubierto la manera de devolver a su estructura nativa a la lisozima, una proteína de la clara de huevo, una vez esta se ha calentado durante 20 minutos a 90ºC.
El investigador Gregory Weiss describe que para recuperar el estado original de la lisozima, se separó la clara de la yema, se calentó la clara durante 20 minutos a 90ºC y se disolvió en urea. En ese momento, los fragmentos de proteínas estaban enredados en masas inutilizables, por lo que los científicos emplearon un dispositivo diseñado por el laboratorio de Colin Raston, en la Universidad Flinders de Australia del Sur, para separar las proteínas enredadas por energía mecánica (girando la solución a altas velocidades), de manera que pudiesen volver a plegarse en su forma adecuada. Posteriormente se purificó la lisozima y se comprobó que había recuperado su funcionalidad.
La idea del proyecto era combatir las dificultades que surgen cuando las proteínas se pliegan incorrectamente y obligan a los científicos a utilizar métodos que requieren mucho tiempo, de días a semanas, para desenredar las proteínas mal plegadas o métodos costosos para asegurar previamente que las proteínas no se vayan a enredar. Utilizando este aparato se reduce el tiempo a minutos.
El investigador Gregory Weiss describe que para recuperar el estado original de la lisozima, se separó la clara de la yema, se calentó la clara durante 20 minutos a 90ºC y se disolvió en urea. En ese momento, los fragmentos de proteínas estaban enredados en masas inutilizables, por lo que los científicos emplearon un dispositivo diseñado por el laboratorio de Colin Raston, en la Universidad Flinders de Australia del Sur, para separar las proteínas enredadas por energía mecánica (girando la solución a altas velocidades), de manera que pudiesen volver a plegarse en su forma adecuada. Posteriormente se purificó la lisozima y se comprobó que había recuperado su funcionalidad.
La idea del proyecto era combatir las dificultades que surgen cuando las proteínas se pliegan incorrectamente y obligan a los científicos a utilizar métodos que requieren mucho tiempo, de días a semanas, para desenredar las proteínas mal plegadas o métodos costosos para asegurar previamente que las proteínas no se vayan a enredar. Utilizando este aparato se reduce el tiempo a minutos.
Los resultados han sido publicados en la revista ChemBioChem y se cree que su utilización podría abaratar los tratamientos contra el cáncer, la producción de alimentos como el queso y otros segmentos de la industria biotecnológica.
El proyecto ha sido financiado por el Instituto Nacional de Ciencias Médicas Generales (NIGMS) de EEUU y el Consejo de Investigación Australiano.
El proyecto ha sido financiado por el Instituto Nacional de Ciencias Médicas Generales (NIGMS) de EEUU y el Consejo de Investigación Australiano.
Fuente de la Universidad de California en Invine (UCI) para ampliar información.
Fuente en español para ampliar información.
Fuente en español para ampliar información.
No hay comentarios:
Publicar un comentario